Cuando conocimos del proyecto de una multimedia que recogerá toda la información posible sobre las Ferias del Libro en Cuba, nos pareció una fantástica idea. Así nace esta entrevista con Grisel Terrón Quintero, directora de Patrimonio Documental de la Oficina del Historiador de La Habana. Nuestra entrevistada es Doctora en gestión y preservación del patrimonio histórico cultural, por la Universidad de Granada. Además, lidera el equipo encargado del trabajo. Al conversar con ella, y con un grupo donde resalta la juventud y la seguridad, contagian de entusiasmo.
¿Cómo surge la idea del proyecto?
La idea de crear una multimedia sobre la historia de las Ferias del Libro venía rondándonos hace tiempo. Rescatar la memoria y hacerla accesible es nuestra misión y, en algún momento, estuvimos buscando información sobre la historia de esos eventos y no tuvimos mucho éxito. Ante la idea, desde la Dirección de Patrimonio Documental se inició un levantamiento que confirmó la dispersión de documentos, fotografías e información en general. Por ello nos acercamos al Instituto Cubano del Libro y en particular a la Cámara del Libro y a Cuba Digital, donde fue aplaudida la iniciativa.
¿Qué podemos encontrar en este producto comunicativo?
Estamos aún en la fase de recopilación de todos los materiales posibles y, aunque sabemos nuestro destino, todavía queda un larguísimo camino. Pretendemos que el producto compendie la memoria de las Ferias del Libro con sus sellos históricos, sus radios de acción, sus invitados, sus alcances, pero todo a través de los documentos, esa es la premisa. No aspiramos a interpretar la Feria, sino a mostrar la documentación que la ha acompañado (previa o como resultado). Esto incluye, fotos, actas, documentos preparatorios, convenios, grabaciones, facturas, discursos, catálogos, biografías y todos los materiales asociados a ese fenómeno cultural.
¿Escollos, hallazgos, satisfacciones?
El principal inconveniente ha estado relacionado con los vacíos encontrados, tanto temporales como documentales. El acto de investigar, con cada hallazgo, con cada conexión en-contrada, con cada conclusión, nos produce mucha alegría. Ver a colegas muy jóvenes trabajar e implicarse con seriedad es otra de las alegrías de este trabajo. La mayor satisfacción será llegar a la meta y entregar a la memoria de la nación la historia de este relevante evento.
¿Cómo imaginas el fruto terminado?
La idea, el sueño, es ofrecer una herramienta útil, disponible en línea, que permita la navegación cómoda por el decursar de la Feria del Libro. Al ser multimedial aspiramos a mostrar los documentos que logremos recopilar y que el usuario pueda interactuar con ellos. Como producto de información, estará disponible para nuevas investigaciones. Como curaduría documental, será un grano más en la batalla por comunicar y hacer de todos la memoria cubana.